¿A quién no le gustaría conseguir una limpieza exprés del hogar? Acabar con la suciedad y el desorden sin tener que ocupar todo el día.
Reúne todos los productos de limpieza
Ten los productos, utensilios y suministros que vas a necesitar a mano. Puedes utilizar una cesta o carrito de limpieza con el cual transportar todo lo necesario a los distintos espacios de la casa.
Pon música
Te ayudará a marcar un ritmo ágil en la limpieza y evitará desconcentrarte del objetivo exprés. Crea una lista de reproducción con canciones cargadas de energía.
Empieza por donde menos te guste
Emplea la motivación y energía inicial en limpiar aquellos rincones que normalmente preferirías dejar para el final.
Discrimina
Sáltate algún paso de la limpieza. Decide qué partes merecen realmente el esfuerzo.
Limpia sobre la marcha
Aquello que se derrame, límpialo. Si no está en su sitio, devuélvelo a donde le corresponde. Pon a remojo los platos hasta que puedas lavarlos.
De seco a mojado
Comienza desempolvando las superficies y pasa después a los trapos húmedos, los productos pulverizados y el trapeador. Muchos rincones quedarán limpios únicamente con la limpieza en seco.
Guarda los productos
Deja los productos de limpieza ordenados y dispuestos para la próxima limpieza exprés, así evitarás perder tiempo la próxima vez que los necesites.